El temor a lo desconocido nos hace conservadores. Esa es la razón de que nos resistamos al cambio. Se cuenta que en una ocasión, un comandante de un fuerte propuso un castigo drástico para los espías. Cuando capturaron al primero, fue llevado a la presencia del comandante, que le dio a escoger entre ser fusilado o pasar por la puerta negra. El espía, atemorizado por las terribles torturas que le esperaban detrás de la puerta escogió ser fusilado. Un recluta preguntó: ¿Qué hay detrás de la puerta? El comandante respondió: La libertad, pero muy pocos tienen el coraje de escogerla. hfigueroa@diariolibre.com
POR HOMERO FIGUEROA
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