domingo, 23 de junio de 2013

La pista de los pasquineros,terroristas de la infamia

La investigacion de los organismos de seguridad del Estado concluye en que hay una “mano negra” detras de todo eso


 

César Medina
Santo Domingo
Los organismos de seguridad del Estado están en posesión de todos los detalles y de las circunstancias en que han circulado clandestinamente dos pasquines voluminosos implicando a funcionarios de la cercanía del Presidente Danilo Medina en acciones definidas como inmorales y en actos de corrupción.

El último de esos documentos apócrifos es de reciente edición, y cualquier lectura superficial evidencia que fue elaborado por manos diestras en ese tipo de manejo, asociando hechos fortuitos con acontecimientos irreales, medias verdades con enormes mentiras, y vínculos familiares con coincidencias homónimas de nombres y apellidos.

El primer pasquín de similar naturaleza comenzó a circular profusamente en algunas redes sociales hace aproximadamente 40 días, pero fue retirada a tiempo de que no llegara a las masas que se mueven en esos medios electrónicos por sus implicaciones legales.

Físicamente, sin embargo, circuló en todos los medios de comunicación y entre dirigentes políticos de todos los partidos, grupos y tendencias. Formula graves acusaciones contra algunas figuras del entorno más íntimo del Presidente, pero no se aporta una sola prueba o alguna pista que pueda sustentar semejantes versiones.

El segundo es casi una réplica del primero, tiene las mismas intenciones de lanzar estiércol sobre la conducta de algunos funcionarios públicos, pero esta vez implica a varios legisladores de la cúpula de ambas cámaras legislativas y lo mismo que en el anterior tampoco aporta una sola prueba.

Una reacción sicológica
El pasquín ha provocado una reacción adversa a sus autores por la cobardía que entraña, aunque no es una práctica nueva dentro de las trapacerías políticas dominicanas, diestra en golpes bajos, espionajes telefónicos, videos alterados, voces falsificadas...

Pero sin ninguna duda el primer pasquín de esta serie, redactado en 23 cuartillas, ha logrado alterar el ánimo de alguna gente en las cercanías del Presidente Medina.

Porque en el arte de construir grandes mentiras, los autores del apócrifo tocan algunas medias verdades que se consideran denuncias que pudieran afectar la estructura familiar de algunos funcionarios.

Esa es la parte más preocupante para el Presidente Medina, que quiere dar el ejemplo, junto a sus colaboradores más cercanos, de que encabeza un gobierno moral que hace énfasis en la importancia de la familia como núcleo central de la organización social. 

Existe una mano negra
La investigación de los organismos de seguridad concluye en que hay “una mano negra” detrás de todo esto, y aunque en un principio se quiso implicar a figuras relevantes del anterior gobierno, al profundizar un poco las pesquisas se ha identificado no solo a los redactores de los dos documentos sino también a quienes los financiaron y pusieron en circulación.

Destaca el interés de grupos que buscan distanciar a los dos líderes fundamentales del peledeismo, Leonel Fernández y Danilo Medina.

El propósito de los pasquineros tenía doble alcance: Atribuir toda suerte de falacias contra figuras destacadas del gobierno, y de paso dejar algunas pistas que conduzcan la investigación por el lado de personas cercanas al ex presidente Fernández, llegándose a insinuar incluso que los documentos apócrifos pudieron ser redactados en la Fundación Global.

Llegaron hasta a señalar al supuesto redactor del pasquín, un conocido periodista, así como al suplidor de la tecnología informática y al financista del macabro plan, los tres relacionados estrechamente al ex presidente Fernández.

Cuando el pasquín circuló por primera vez, Leonel se encontraba en Francia, cumpliendo un programa académico. Un amigo le mostró una copia, pero él se negó a leerlo argumentando que ese tipo de documento no le merece ninguna atención ni siquiera para conocer su contenido.

Las principales calumnias se levantan contra el propio Presidente Medina, su más cercano colaborador y amigo, Carlos Pared, y contra los dos ministros de su cercanía más próxima, Gustavo Montalvo y José Ramón Peralta.

Las FFAA, PN y DNI
El Presidente Danilo Medina impartió instrucciones drásticas tanto al ministro de las Fuerzas Armadas como al jefe de la Policía y al director del DNI para que indagaran minuciosamente la afrenta de los pasquines.

Desde un principio el mandatario estuvo consciente de que la autoría de los apócrifos no provenía de sus propios compañeros de partido. “En eso Danilo siempre ha estado claroÖ”, dijo el informante de “ÖLa Tecla”.

Los organismos que llevaron a cabo la investigación-- SS de la Policía, J-2 de las Fuerzas Armadas, y DNI de la Presidencia--, confrontaron sus resultados y llegaron a la misma conclusión, recabaron pruebas comprometedoras y hasta se rescataron los discos duros de los equipos que procesaron la información perversa.

El Presidente Medina ha sido depositario del resultado de la investigación y será él quien determine el curso que seguirá el expediente, si se apoderara al procurador general de la República para que ponga en movimiento la acción pública.

En este último caso los efectos se verían en el curso de la semana que inicia mañana porque los autores de ambos pasquines están debidamente identificados, ubicados las 24 horas del día y solo se aguarda la orden superior para iniciar el procedimiento legal que los llevaría a la cárcel.

Otra alternativa que se discute entre los estrategas del gobierno es evidenciar a los autores y no formularles acusación alguna, pero presentar las pruebas con todos sus detalles para que la sociedad conozca la dimensión de semejante perversidad. 

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LA HISTORIA DEL PASQUÍN
El pasquín como documento apócrifo y degradanteópuesto de moda en estos días para levantar los demonios contra el gobierno--, existe desde un siglo antes del nacimiento de Cristo. 

Su origen se sitúa en Roma y tiene que ver con un barbero que sobresalió por chismoso llamado “Il Paschino” que luego fue llamado Pasquino para designar una burda estatua sin domicilio que al morir el barbero se colocó donde estaba su barbería.

La barbería de Pasquino fue siempre el centro de acogida de vagos y hablanchines cuyo único oficio era el chisme de pueblo. El día menos pensado amaneció con la boca llena de hormigas.

Desde entonces, y hasta la fecha actual, en los faldones de la burda estatua se pegan todos los chismes apócrifos de la vieja Roma, costumbre que se mantiene con el paso de los siglos, ya desacreditada “pero le resuelve a los chismosos”.

En el mundo literario el pasquín es el equivalente de la hiena en el reino animal: rastrera, ladina, aprovechada, cruel, traicionera, carroñera, sin escrúpulos, cobarde, despreciable...

Por su propia condición, el pasquín está reservado a los perversos y despiadados, mentirosos y chismosos incapaces de dar la cara por sus propias calumnias, personas sin el coraje para sostener acusaciones que suelen causar daños morales, familiares, profesionales y económicos.

Es el arma más innoble del que ha perdido la razón...

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