En Washington, nadie es responsable del fiasco sufrido en Siria por Thierry Meyssan
En el momento de abandonar la escena, la secretaria de Estado Hillary Clinton defendió su trabajo en una entrevista concedida al New York Times [ 1 ]. Y como complemento, agregó varias confidencias deslizadas en «off» a los periodistas, que a su vez las incluyeron en un artículo aparte [ 2 ]. Preocupada por conservar sus posibilidades para la elección presidencial de 2016, la señora Clinton se esforzó en hacer recaer sobre el presidente Barack Obama la responsabilidad de su propio fracaso en Siria. Al cabo de 2 años de guerra secreta, los grupos armados que debían justificar una intervención de la OTAN, o incluso derrocar ellos mismos el régimen sirio, han perdido su aureola de «revolucionarios» y se han ganado la reputación de fanáticos. El presidente Bachar al-Assad, quien se mantiene vivo y en su puesto, se ha hecho más ineludible que nunca. La diplomacia estadounidense, que constantemente anunciaba la «caída del tirano» para la próxima semana, se ha puesto en ridículo. Mientras q