O cambiamos o perecemos

Compartir este artículo Pablo Mckinney Las teorías de Leonel y Facundo Hace tiempo que los efectos negativos de la crisis de valores que abate a Occidente llegaron a la economía mundial, y explotaron en aquel septiembre del 2008 con Lehman Brothers. Hace unos meses, se apoyaba uno en Facundo Cabral y en Leonel Fernández para explicar las razones de esta crisis que trasciende la economía y llega al ser, pues es la expresión de un tiempo en que la humanidad (por primera vez en más de 60 años) se ha quedado sin referentes éticos, políticos ni religiosos. Y así está este ciudadano de Occidente, desnudo ante el mundo. Precisamente, buscando explicación, pregunté a Cabral sobre el asunto y contó que el hombre de la jodida postmodernidad no puede ser feliz porque, esclavo de las apariencias, “compra unos bienes que no necesita, con un dinero que no tiene, para impresionar a unas gentes que no conoce, ni él les importa.” Del barrio chino llegué a Funglode y pregunté al profesor Leonel Fernández, quien me explicó que la economía occidental anda mal entre otras muchas razones, porque unos zares de la especulación mundial “compran un petróleo, unos commodity, que no necesitan, a unos señores que no lo tienen todavía y con un dinero que ninguno de los dos poseeÖ”. Y así rueda una rueda que ya no depende de la producción ni los mercados, sino de la especulación más vulgar e inhumana. La ley natural de la oferta y la demanda ha sido sustituida por la ilegítima ley de la especulación parasitaria, mortal para la estabilidad y sostenibilidad de la economía mundial, y letal para la paz mundial y las democracias a mediano plazo. He aquí el capitalismo salvaje sin rostro humano del que habló, Juan Pablo II. Palabras del Papa don Francisco Así andaban las cosas, hasta que la pasada semana, el presidente Danilo Medina fue recibido en audiencia con el Papa de los católicos, y el hombre se encargó de recordarle a nuestro Presidente sus posiciones sobre el tema. Superando a Cabral y a Fernández, el Papa criticó un sistema económico injusto “desde la raíz, porque en la economía predomina la ley del más fuerte, siendo una nueva tiranía invisible, a veces virtual dominada por un mercado divinizado, en el que imperan la especulación financiera, una corrupción ramificada y una evasión fiscal egoísta. (...) hoy tenemos que decir “no” a una economía de la exclusión y la inequidad. Esa economía mata.” Y por ahí sigue el don Papa, a quien le interesa visitar la Isla de todas las primacías americanas, a lo que ya le invitó el presidente Medina. La visita del Papa a RD Sería maravilloso una visita del Papa a Dominicana, no tanto por lo que verá el pontífice, sino por lo mucho que puede ayudar a más de un señor de sotana a entender los cambios que viene, y seguirá dando el mundo y la Iglesia. Una iglesia que a pasito lento avanza en sus esfuerzos por adaptarse a los nuevos tiempos y sus mandatos de igualdad, inclusión, y respeto a la diversidad. (Por cierto, según supe ayer, ciertos peledeístas y algunos señores de la oposición agradecerían mucho que la visita papal se realizara antes de agosto 2016, no vaya a ser vainas, y por asuntos de retraso de la agenda papal, deba el presidente Medina, ñpor no quedar mal ante el mundo y el paísñ repostularse al cargo para poder recibir a su Santidad en noviembre 2016). Ni especulación, ni religión, ni reelección, solo el amor   Nunca es tarde para entenderlo, sólo el amor impone sus reglas y manda a freír a la lógica especulativa y rastrera por encima de números y estadísticas. Por eso no basta con la ya vieja reflexión del profesor Leonel Fernández (anda para Europa exponiéndola otra vez frente a la ONU y OCDE), las de Facundo o las recientes palabras del Papa sobre el asunto. En el mundo actual, tan perdido en sí mismo, no hay tiempo para el egoísmo. Cambiamos o perecemos. El mundo está cambiando, y al fin tendremos los hombres que entenderlo: “Lo que no cura el amor no hay médico, sacerdote ni gobierno que lo cure”. Que al fin, lo sabemos: Sólo se trata del amor, de entender que hoy como nunca, “la humanidad es mi familia y todo ser humano mi hermano”. Amén. tomado del listin diario