Avanza la revolución mundial

J.C. Malone
Jcmalone01@aol.com

Nueva York.- Empecemos por desaprender la revolución no es un acontecimiento que se produce en el tiempo y el espacio. No es una acción ni ocurrió un día, en un lugar específico; la revolucieon es un proceso que evoluciona, se renueva y expande. Estalla en un lugar y siempre termina en otro. 

Immanuel Wallerstein, el brillante sociólogo e historiador neoyorquino asegura que todas las revoluciones son mundiales. La Revolución Americana de 1776 estalló contra la monarquía y el colonialismo. Sus postulados de Libertad e Igualdad tardaron 13 años en llegar a Europa, ahí estalló la Revolución francesa de 1789 postulando libertad, igualdad y fraternidad. En 1804 estalló en Haití y para 1898, cuando Estados Unidos derrotó a España en la Guerra Hispano-Americana de Cuba, murió el viejo colonialismo.

Durante el siglo XX vimos el auge y caída de la revolución marxiana mundial.

La agenda de la libertad avanzó, pero la de la igualdad está estancada. Todavía no tenemos igualdad de oportunidades económicas ni recibimos igual trato ante la ley.

La nueva revolución mundial comenzó en Túnez en diciembre del 2010 con la autoinmolación de un vendedor callejero. Este nuevo movimiento no tiene líderes, porque se levanta contra el liderazgo tradicional, reclamando mayor igualdad de oportuidades.

En Egipto demandaban libertades públicas desde junio del 2010. El derrumbe de la dictadura Tunisia en enero del 2011 fue el detonante. Sin líderes, los egipcios terminaron los 30 años del dictador Hosni Mubarak. Siguió en Libia, la India, Europa, Estados Unidos y Latinoamérica; hoy cubre el planeta. En República Dominicana esta nueva revolución mundial, sin líderes, está viva y latente, estallará con los detonantes apropiados.

Quienes se opongan serán arrollados por el tren expreso del proceso, porque están del lado equivocado de la historia; ningún politico corrupto detendrá esta nueva revolución mundial. Es imparable.