Retos presentes y futuros de la RD
VIVIR SIN LO BÁSICO
Retos presentes y futuros de la RD
EL AGUACATE, CUANDO SE SUBE Y BAJA POR LA ESCALERA DE UNA MISERIA CON TODO EN CON
En el barrio El Aguacate, de La Puya, de Arroyo Hondo, en el Distrito Nacional, viven 280 familias. Para llegar o salir de allí hay tres opciones: bajar o subir 180 escalones, por un lado; 165 por otro, ó 50 escalones más un largo trecho bordeando los más angostos callejones y copiosos montes a orilla de una cañada pestilente.
Cuando alguien se enferma debe ser sacado en hombros hasta llegar a la vía desde donde pueda abordar un vehículo que lo transfiera a uno de los hospitales más cercanos: el Francisco Moscoso Puello, el Infantil de Enfermedades Respiratorias Santo Socorro o al Luis Eduardo Aybar, ubicados a una distancia de aproximadamente tres kilómetros.
Sus residentes, la mayoría niños y jóvenes, viven en espacios pequeños, casas desvencijadas, cuyas paredes y techos están construidas del mismo material: zinc y cartones, muchas con piso de tierra.
Laberinto
El transitar entre los hogares se hace en medio de polvorientas callecitas y callejones, donde dos personas no pueden caminar a la par. El ambiente es el mismo: una maloliente cañada donde desembocan las escasas tuberías que sirven de drenaje sanitario.
Muchas de las viviendas carecen de inodoros, por lo que sus residentes como Gertrudis Jone, de 70 años de edad, casi 30 residiendo en el lugar, usan la cañada “o el monte” para hacer sus necesidades fisiológicas. Allí los baños son escasos y el acceso al agua potable no es de todos; algunos se suplen de una toma adaptada en medio de uno de sus callejones. Para bañarse, la mayoría utiliza el agua de un arroyo que cruza por la cercanía.
Las puertas abren sus brazos a los visitantes, aunque pocos extraños se atreven a contemplar su paisaje ante la inseguridad que se percibe. Sólo el que se hace resguardar de alguien entre sus habitantes, sobre todo joven, puede moverse con libertad.
La escuela
Para asistir a la escuela, los muchachos también requieren trajinar en medio de callejones y escalones. Esta semana, pese a que la docencia había iniciado, ninguno de sus escolares había visitado el aula, por lo que a media mañana del martes jugaban descalzos en medio de los caminos.
Ante esas condiciones sanitarias, no fue extraño para nadie que el cólera, en su debut por República Dominicana a finales del año 2010, se ensañara contra ellos, afectando a cientos de sus comunitarios. En ese entonces se instaló allí una Unidad de Atención Primaria (Unap) para dar asistencia médica, cuya puerta cerró inmediatamente la visita de la prensa, que se desvió a otro lugar.
En un obsoleto contraste, se puede observar una realidad muy diferente. Hermosas e inmensas mansiones, de enormes marquesinas, ubicadas en terrenos altos, que dejan ver una vista magestuosa. Es el sector Arroyo Hondo.
Y, a no más de 5 kilómetros de allí, también en el Distrito Nacional, está la avenida Anacaona, donde sus habitantes saben muy bien de agua fría y caliente, de calles bien asfaltadas y viviendas ubicadas en lujosas torres.
Allí el progreso se ve ante la imponente vista de los altos edificios habitados y otros en construcción. Ver quienes la habitan es casi imposible.
Cuando enferman son trasladados hasta en aeroambulancias a importantes centros asistenciales privados o simplemente viajan cada año al extranjero a practicarse chequeos médicos preventivos o ejecutivos.
Los habitantes de El Aguacate forman parte, además, de los más de un millón de dominicanos que requieren de un techo digno, y que es una de las prioridades que deben enfrentar con urgencia las autoridades. En el país abundan aquellos que no tienen facilidades de salud, educación, servicios de electricidad y agua potable.
Ignoran por completo cómo se divierten en el polígono central de la Capital, en las confortables salas de cine, en las modernas áreas de juegos infantiles, en las impresionantes torres de plazas comerciales o ‘malls’, en las tiendas de ropas de exclusivas marcas, exquistos perfumes, carteras y zapatos de famosos diseñadores. En sus camas sienten las goteras de la lluvia porque sólo les cobija la pobreza.
TRES GRANDES PREOCUPACIONES
DESEMPLEO EN JÓVENES
Mujeres con peor carga Max Puig, ex ministro de Trabajo, indica que cifras del Banco Central ubican el desempleo ampliado en el país en un 13%. Los más afectados son jóvenes hasta 29 años, 23% varones y 36% mujeres, un grave problema.
CALIDAD DE EDUCACIÓN
Cuadro deficiente La educación tiene el reto de salir del cuadro deficiente que arrojan las evaluaciones, consideró María Teresa Cabrera, ex presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores, quien ve como una vergu¨enza el 13% de analfabetismo.
CRÉDITOS A PRODUCCIÓN
Competitividad “Ninguna empresa, ninguna industria se puede desarrollar si no hay acceso al financiamiento a largo plazo y bajos intereses”, considera Sandy Filpo, presidente de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago.
Educación, desempleos y electricidad
Los embarazos en adolescentes son un gran problema que troncha la educación en el barrio El Aguacate.
“Aquí, desde los 12 años, ya las muchachas tienen hijos; a los 15 años, suman tres crías; ante esa situación dejan la escuela y llevan más problemas a su casa”, dijo Mirelis Montero, presidenta de la Asociación de Mujeres en Desarrollo, del sector La Puya, de Arroyo Hondo.
En muchos hospitales públicos, más del 26% de los partos que registran corresponden a adolescentes.
El área de maternidad del hospital regional José María Cabral y Báez, en Santiago, registra que de cada 100 embarazadas tratadas allí, entre 20 y 25 corresponden a adolescentes con edades de entre los 14 y 18 años.
De acuerdo a cifras oficiales, actualmente la tasa de mortalidad materna en el país es de 109 por cada 100 mil nacidos vivos y 26 por cada 1000 nacidos vivos, respectivamente.
Para el 2015, los compromisos establecen reducir en dos terceras partes, entre 1990 y 2015, la mortalidad de los niños menores de 5 años y reducir la mortalidad materna en tres cuartas partes, entre 1990 y 2015.
Sed de agua
Las grandes ciudades del país, como es el caso de Santiago, donde el consumo es de unos 130 millones de galones al día, para llenar la demanda de la población, la producción actual es de unos 115 millones de galones, lo que equivale a un déficit de 15 millones de galones diarios, mientras en Moca el suministro de agua potable es de 26 millones 231 mil galones, para una demanda de 28 millones 512 mil galones, un déficit de dos millones 300 mil galones diarios.
Para solucionar la situación, es necesario construir nuevos sistemas de suministro de agua, corregir el desperdicio, estimado en más de la mitad del agua potable que se produce. Estimaciones hechas por expertos del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) indican que para el 2025 se proyecta un déficit que afectará la cuenca del Yaque del Norte, que aporta actualmente 3,086 millones de metros cúbicos por año.
Necesidad de un techo
Para contrarrestar el déficit de viviendas, dijo el ingeniero Cristian Ciccone, vicepresidente de la Cámara Dominicana de la Construcción (CADOCON), se necesita construir entre 25,000 y 30,000 unidades por año.
El déficit de viviendas en el país supera el millón de acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Al año, los sectores público y privado construyen unas 12,000 viviendas, según Ciccone. Construir una vivienda de las denominadas bajo costo ronda los RD$700,000 a RD$1 millón.
Una vivienda para el estrato de la clase media supera los RD$5 millones. En ambos estratos, la dificultad de créditos para hacer realidad su sueño les dificulta concretizar su sueño; a veces queda en un imposible en miles de familias, que de generación en generación se quedan sin viviendas propias.
(+)
CRISIS ELÉCTRICA DRENA PRESUPUESTO
En los últimos 8 años, el gobierno ha destinado más de mil millones de dólares anuales en subsidios, para evitar traspasar los costos de generación al consumidor y para cubrir el problema de las pérdidas de electricidad por falta de pago o por hurto de electricidad. Durante más de 40 años, el sector eléctrico de la República Dominicana ha atravesado por muchas crisis que lo han hecho insostenible, convirtiéndose en el principal problema para la competitividad. Parte de la solución es continuar con las reformas estructurales del sector que permitan renegociación y contratación de generación eléctrica para bajar el costo de producción de la electricidad.
En el período enero-abril del 2012, según el informe de Desempeño de la CDEEE, las distribuidoras compraron 3,478.2 GWh, 0.4% menos energía que en el mismo período del año anterior. La factura por compra de energía ascendió a MMUS$ 643.8 (un aumento del 11.0% respecto a 2011), mientras que la facturación por venta de energía fue de MMUS$ 494.2, (9.2% más que en 2011). Los cobros por concepto de energía se situaron en MMRD$ 17,326 (12.1% mayor que en el mismo período 2011).
Continuar los planes de diversificar la matriz de generación, seguir aumentando la producción hidráulica, nuevos parques eólicos, energía solar y otras fuentes de energía no convencional o alternativas, forman parte de la solución al problema. Se estima que el programa de readecuación de redes que ha resultado en la rehabilitación de 2,600 kilómetros de líneas de distribución, es la clave para lograr la recuperación del sector porque va a permitir reducir pérdidas por falta de pago, hurto y por mala calidad de la red, igualmente permitirá la incorporación de nuevos clientes formales.
El sector eléctrico dominicano viene recibiendo ayuda del Banco Mundial, en conjunto con el BID (Banco Interamericano de Desarrollo) y el OFID (Fondo para el Desarrollo de la Organización Mundial del Petróleo OPEP) por un valor cercano a los 152 millones de dólares, cuya implementación se terminará a final de 2013. David Reinstein, especialista del Banco Mundial para el sector de Energía, dijo a LISTÍN DIARIO que se prevé que esa inversión permita reducir pérdidas (tres o cuatro por ciento) y lo más importante, que permita asegurar clientes normalizados y recuperar ingresos para las Empresas de Distribución.
Cree que de garantizarse la continuidad en las políticas y las inversiones que necesita el sector, tal como fue planteado en los mencionados Planes de Negocios, el sector podrá empezar a recuperarse hacia finales del 2014.
4% DEL PIB A LA EDUCACIÓN
Una de las más grandes demandas sociales hechas al gobierno será aplicada a partir de enero 2013, con el nuevo presupuesto: el 4% del PIB, unos RD$103 mil millones, dijo el economista Nelson Suárez.
COSTOS CARRERAS
Universitarias Fundapec indica que el costo para cursar una carrera universitaria oscila entre RD$150 mil y RD$975 mil.
HAITÍ EN ESPERA
Controles de inmigración Organizar la masiva inmigración desde Haití, uno de los principales socios comerciales es uno de los mayores retos.
SIN TRABAJO
Falta generación Cada año llegan a la edad laboral en el país 87,000 jóvenes, pero los puestos de trabajo no se están creando.
CRISIS ELÉCTRICA
Servicio caro y malo El deficiente sistema eléctrico es, desde hace 40 años, una carga pesada para el país.
DÉFICIT DE AGUA
Gran Santo Domingo Con 3.3 millones de habitantes, el déficit de agua potable es de más de 182 millones de galones diarios.
400,000 FUERA AULAS
Déficit de escuelas Más de 400,000 niños y adolescentes están fuera de las aulas. Hay un déficit de 15 mil aulas, y el presidente Medina prometió construir 18,000.
AÑO ESCOLAR
Cantidad de estudiantes En el año lectivo 2012-2013, iniciado este mes, están matriculados 2.7 millones en diferentes niveles.
PREOCUPAN HOMICIDIOS
Inseguridad ciudadana Desde el año 2007 al mes de mayo del presente año en el país se han registrado 12,732 homicidios.
MALTRATOS A MUJER
Feminicidios Desde el 2007 al primer semestre de este año se han producido 1,121 muertes de mujeres a manos de hombres.
UN MILLÓN SIN CASAS
Déficit es creciente El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo señala que el déficit de viviendas en el país es de un millón.
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