El poder de la sugestión
El poder de la sugestión
También tiene un lado negativo, pueden nublar nuestro pensamiento para tomar decisiones.
La sugestión influye y mejora en la forma en que nos comportamos, aprendemos o memorizamos algo, también en cómo nuestro cuerpo puede responder positivamente a los suplementos alimenticios o a algunos medicamentos, lo que explica el conocido efecto placebo.
Psicólogos intrigados en ¿qué puede explicar el poder de la sugestión en nuestras vidas? encontraron que se lo debemos a nuestras "expectativas de respuesta", es decir a las formas en las que estos pensamientos se anticipan en nuestro comportamiento en situaciones diversas.
Estas expectativas nos preparan para dar respuestas automáticas que influyen activamente para lograr los resultados que esperamos. Una vez que nos enfocamos en lo que queremos, nuestros pensamientos y conductas actúan en consecuencia, de tal suerte que al sugestionarnos hacemos y pensamos todo lo necesario para lograr nuestro objetivo.
Por lo tanto, si una persona normalmente tímida espera que una copa de vino o dos le ayudará a aflojarse en una fiesta, probablemente se sentirá menos inhibido, se acercará más personas, y participará en más conversaciones en el transcurso de la fiesta. A pesar de que le puede dar crédito a las copas de vino, está claro que fue su sugestión.
La sugestión influye y mejora en la forma en que nos comportamos, aprendemos o memorizamos algo, también en cómo nuestro cuerpo puede responder positivamente a los suplementos alimenticios o a algunos medicamentos, lo que explica el conocido efecto placebo.
Psicólogos intrigados en ¿qué puede explicar el poder de la sugestión en nuestras vidas? encontraron que se lo debemos a nuestras "expectativas de respuesta", es decir a las formas en las que estos pensamientos se anticipan en nuestro comportamiento en situaciones diversas.
Estas expectativas nos preparan para dar respuestas automáticas que influyen activamente para lograr los resultados que esperamos. Una vez que nos enfocamos en lo que queremos, nuestros pensamientos y conductas actúan en consecuencia, de tal suerte que al sugestionarnos hacemos y pensamos todo lo necesario para lograr nuestro objetivo.
Por lo tanto, si una persona normalmente tímida espera que una copa de vino o dos le ayudará a aflojarse en una fiesta, probablemente se sentirá menos inhibido, se acercará más personas, y participará en más conversaciones en el transcurso de la fiesta. A pesar de que le puede dar crédito a las copas de vino, está claro que fue su sugestión.
Pero psicólogos de la Universidad Victoria de Wellington encontraron que no sólo la sugestión deliberada resulta, también las sugestiones inconscientes pueden tener los mismos efectos.
El simple hecho de ver o estar con ciertas personas o cualquier otra forma en que las personas se sientan especiales pueden ser sugestiones, esto es un fenómeno llamado el efecto Hawthorne. Como resultado, la gente podría trabajar más duro, o se adhiere a una tarea durante más tiempo. Y este caso es más porque a pesar de que podría entonces dar crédito a un nuevo medicamento o tratamiento, no nos damos cuenta de que nosotros somos los que realmente estámos armados con esa supuesta mágica influencia", aseguró Maryanne Garry en la revista Current Directions in Psychological Science.
Es precisamente por esta razón que el tema de la sugestión no intencional tiene implicaciones importantes para los investigadores académicos.
"En la comunidad científica, tenemos que ser conscientes y capaces de controlar las sugestiones. Investigaciones recientes sugieren que algunos de los hallazgos más intrigantes de la ciencia psicológica pueden ser conducidos, al menos en parte, por la sugestión y la esperanza. Por ejemplo, un científico que plantea cierta hipótesis de un experimento, sin saberlo podría sugestionarse y hacer todo para que el experimento resulte así", alertó Garry.
Estos efectos negativos no sólo ocurren en los laboratorios, sino también puede afectar la vida diaria; por ejemplo el que alguna persona identifique de forma errónea a algún delincuente por los efectos de la sugestión.
Si bien la investigación proporcionó una clara evidencia del fenómeno de la sugestión, aún hay mucho más que aprender acerca de la relación subyacente entre la sugestión, la cognición y el comportamiento. Como señalan los autores, los investigadores aún no saben dónde están los límites y las limitaciones de estos efectos, por lo que se deben realizar más estudios para ello.
El simple hecho de ver o estar con ciertas personas o cualquier otra forma en que las personas se sientan especiales pueden ser sugestiones, esto es un fenómeno llamado el efecto Hawthorne. Como resultado, la gente podría trabajar más duro, o se adhiere a una tarea durante más tiempo. Y este caso es más porque a pesar de que podría entonces dar crédito a un nuevo medicamento o tratamiento, no nos damos cuenta de que nosotros somos los que realmente estámos armados con esa supuesta mágica influencia", aseguró Maryanne Garry en la revista Current Directions in Psychological Science.
Es precisamente por esta razón que el tema de la sugestión no intencional tiene implicaciones importantes para los investigadores académicos.
"En la comunidad científica, tenemos que ser conscientes y capaces de controlar las sugestiones. Investigaciones recientes sugieren que algunos de los hallazgos más intrigantes de la ciencia psicológica pueden ser conducidos, al menos en parte, por la sugestión y la esperanza. Por ejemplo, un científico que plantea cierta hipótesis de un experimento, sin saberlo podría sugestionarse y hacer todo para que el experimento resulte así", alertó Garry.
Estos efectos negativos no sólo ocurren en los laboratorios, sino también puede afectar la vida diaria; por ejemplo el que alguna persona identifique de forma errónea a algún delincuente por los efectos de la sugestión.
Si bien la investigación proporcionó una clara evidencia del fenómeno de la sugestión, aún hay mucho más que aprender acerca de la relación subyacente entre la sugestión, la cognición y el comportamiento. Como señalan los autores, los investigadores aún no saben dónde están los límites y las limitaciones de estos efectos, por lo que se deben realizar más estudios para ello.
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